Insectos de almacén o de alimentos almacenados: qué hacer para lograr eliminarlos de tu cocina

Los insectos de almacén o de alimentos almacenados, como los gorgojos (pequeños escarabajos coleópteros de la familia de los curculiónidos), los tenebrios (o escarabajos molineros), los escarabajos de la harina (Tribolim) o la carcoma del pan (Stegobium paniceum), pueden llegar a 'campar a sus anchas' por tu casa. Si quieres saber cómo eliminarlos de tu cocina, toma nota.

Aunque parezcan insignificantes, es importante acabar con ellos lo antes posible, ya que pueden extenderse por toda la alacena y suponer un verdadero problema para tus alimentos.

Suelen vivir entre los productos abiertos de la despensa, por lo que será importante desechar los artículos que no estén sellados o hayan quedado abiertos, ya que ante una infestación de estas plagas ellos suelen viven ahí, incluso aunque todavía no los hayas notado.

Empieza por seleccionar aquellos artículos que no estén cerrados o aquellos que ya hayan sido abiertos pero que no estén bien cerrados, porque también pueden ser un gran lugar para los gorgojos. Será necesario que tires tanto unos como otros. El siguiente paso es aspirar muy bien. Cuando hayas terminado deberás limpiar en cualquier caso muy bien el espacio.

Aplicando estos consejos los insectos de almacén deberían desaparecer por completo, o por lo menos significativamente. Si no fuera así, lo mejor será que te pongas en contacto con una empresa especializada en el control de plagas como COPLAGA.

Una vez rematado su trabajo, no olvides de todas maneras a partir de ese momento cuidar bien tus alimentos y mantenerlos siempre cerrados o sellados. Porque aunque es importante saber cómo eliminar estos insectos de alimentos almacenados de la cocina, también lo es conocer cómo evitarlos, para no tener que volver a pasar por ese problema.

De manera preventiva, inspecciona los granos o productos secos antes de comprarlos, por si observaras algún paquete abierto o roto. Si no lo tienes del todo claro, cuando llegues con la compra a casa congélalos un mínimo de cuatro días, para matar las larvas o los huevos, y por supuesto no consumas el producto.

Por norma general, guarda los alimentos en recipentes herméticamente cerrados, y compra los productos secos en cantidades más pequeñas, para evitar almacenarlos mucho tiempo. Limpia regularmente tu despensa. En caso de algún derrame, retíralo de inmediato, e inspecciona la alacena y los productos para detectar posibles signos de la presencia de estos insectos.

Si has observado algo que te genera cualquier tipo de sospecha o de dudas, no tengas problema en ponerte en contacto con los especialistas de COPLAGA, que te asesorarán gustosamente. Llámanos a los teléfonos 956 83 47 58 (para la provincia de Cádiz) ó 955 66 74 08 (para la de Sevilla).