Los meses de mayo a septiembre son los de mayor confluencia de los diferentes tipos de plagas urbanas. Hoy traemos un esquema con la estacionalidad de estas, y os detallamos cuáles son los factores que favorecen su aparición y qué elementos habrá que corregir de manera preventiva antes de tener que acudir a técnicos especializados si nos encontramos ante una plaga.
Las cucarachas se extienden de mayo a octubre. Suelen aparecen en las cocinas y aseos (lugares con calor, humedad, comida y desagües). Requiere corregir aspectos como la presencia de grasa en la cocina o los accesos a desagües sin tapar o mal sellados.
Las hormigas se hacen más evidentes de mayo a septiembre. Pueden proliferar en los jardines anexos a nuestras viviendas o en las plantas ornamentales de interior. Habrá que sellar las juntas y grietas y limpiar restos de alimentos en las cocinas.
Los mosquitos resultan especialmente molestos de abril a octubre. Habrá que controlar posibles reservorios de agua (que son ideales para la puesta) y los setos y acumulación de flores (que pueden servir de cobijo para los adultos). Requiere controlar los drenajes y poner malas de ventilación en las fosas sépticas.
Las avispas están más a la orden del día de mayo a septiembre. Habrá que estar atentos a posibles anidamientos bajo tejas, en muros de piedra, en setos y en estructuras secas. Como norma general, siempre estarán próximos a aportes de agua. Requerirá cerrar esas hoquedades y localizar los avisperos.
Hay otras plagas que permanecen durante todo el año, como las garrapatas, las chinches de cama o los xilófagos (carcomas y termitas). Respecto a las garrapatas, estas proliferan en terrenos abiertos con concentración de maleza. Habrá que pretar atención al desparasitado de nuestras mascotas.
Las chinches de cama se vinculan al trasiego de mercancías y de personas debido al turismo, razón por la que en estos tiempos tan condicionados por el coronavirus se ha observado una cierta disminución. Lo mejor será revisar nuestro equipaje tras cualquier viaje y supervisar el entorno de nuestra cama, por si halláramos en ella manchas oscuras, sangre o presencia de insectos.
Por último, la irrupción de la carcoma y las termitas se suele vincular a la existencia de humedades estructurales, sobre todo cuando hay contacto con madera. Habrá por tanto que eliminar esas humedades y proteger a la madera de daños externos.
Sea cual sea el momento del año en que te encuentres, si eres propietario de un establecimiento, empresa u oficina, o si quieres eliminar cualquier posible plaga de tu domicilio, puedes ponerte en contacto con COPLAGA a través de nuestros teléfonos 956 83 47 58 (para la provincia de Cádiz) ó 955 66 74 08 (para la de Sevilla).
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