Si hay lugares en los que hay que tener especial cuidado con las plagas es en los restaurantes y bares, al ser espacios donde se sirven comidas y bebidas. La hostelería es un sector en el que, por registrar algunas condiciones ambientales y estructurales muy concretas, se propicia la aparición de plagas. En este tipo de establecimientos la higiene y el control sanitario deben ser siempre una prioridad. En este artículo detallaremos cuáles son los tipos de plagas más frecuentes y cómo mantenerse alejados de ellas.
Por lo general, estas plagas suelen confluir en los bares o restaurantes porque encuentran buenas condiciones para habitar el lugar (y por tanto para anidar) y por la abundancia de alimentos, factores muy favorables para su subsistencia. Es muy sencillo que en este tipo de locales caiga algún resto de comida al suelo o en otros rincones, que rápidamente se convertirán en sustento para estas plagas.
Entre los insectos que pueden afectar a la seguridad higiénica de un local, uno de los más comunes son las cucarachas, fundamentalmente las cucarachas alemanas. Lo peor de ellas es que se extienden muy rápidamente, lo que las convierte en una de las preocupaciones más importantes para los profesionales hosteleros. Tienen una gran facilidad para colarse por las grietas, tuberías o ventanas, por lo que el mejor remedio es la prevención.
Otra posible amenaza son las hormigas. Frente a ellas (algo común con el resto de invasores), es recomendable guardar todos los alimentos en un almacén, bien cerrados y lejos de las zonas en las que pueden aparecer. Sellar sus principales vías de acceso es otro aspecto fundamental, ya que su tamaño tan pequeño les permite entrar casi por cualquier resquicio a un establecimiento.
Entre los roedores, la rata es la que mayor grado de contaminación genera, lo que la hace muy peligrosa. Desde que nace se desarrolla en condiciones insalubres, pudiendo portar numerosas bacterias nocivas y enfermedades. El ratón doméstico es otra especie con relativa relevancia. Aunque también generan contaminación, lo hacen en menor medida y sus efectos no suelen ser tan drásticos. De todos modos, una infestación de este tipo de roedores puede extenderse rápidamente y traernos problemas a muy corto plazo, por lo que es mejor mantener nuestro local bien protegido.
Si por desgracia ya cuentas con una plaga de insectos o de roedores en tu establecimiento, lo mejor será que contactes con una empresa especializada como COPLAGA para que revise tu instalación y haga una fumigación completa. Una vez realizada, lo más recomendable es mantener medidas de prevención de una manera periódica, con lo que evitaremos nuevas infestaciones.
Puedes contar con COPLAGA como tu aliado de confianza para mantener el nivel de higiene y salubridad imprescindible en tu bar o restaurante. La prevención es el mejor remedio, y lo ideal es contratar inspecciones periódicas (e intervenciones, en caso de que fuera necesario), llamándonos a nuestros teléfonos 956 83 47 58 (para la provincia de Cádiz) ó 955 66 74 08 (para la de Sevilla).
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